domingo, mayo 07, 2006

La Administración se equivocó

El dedo de Ribó

JOSÉ ANTICH - 07/05/2006 La Vanguardia

Ha tenido que ser el Síndic de Greuges, Rafael Ribó, el que extendiera el dedo acusador de lo que la Administración ha tratado de disimular con explicaciones muchas veces confusas y en otros casos cuando menos tardías: hubo graves fallos de coordinación en el caso de la pequeña Alba, la niña de cinco años de Montcada que sufrió graves maltratos. El Síndic las sitúa en diversos departamentos de la Generalitat, pero acaba responsabilizando nítidamente a Benestar i Família. ¿Se hubiera podido evitar? La pregunta perseguirá a muchos de los que intervinieron en diferentes fases de las largas semanas en que la niña sufrió malos tratos y su caso fue simplemente un expediente que iba de despacho en despacho. Pero es bueno que de los fallos se haya aprendido, y seguramente la conmoción ciudadana ha hecho que las instancias administrativas estén ahora más encima de casos como el de Alba, como se ha podido ver ya en algún otro ejemplo similar. En cualquier caso, muchas veces surgen voces que con una cierta sorna se preguntan de qué sirven instituciones como la Sindicatura de Greuges. Rafael Ribó, político experimentado y con una larga trayectoria de hombre de partido - primero en el PSUC y después en IC-, ha sabido dotar a la institución de un dinamismo que se había ido perdiendo y mantener una impronta institucional e independiente.

No hay comentarios: